1.- Rasgos generales de la literatura barroca
a) Pesimismo: en un contexto de crisis socioeconómica y marcado por la Contrarreforma católica, el mundo terrenal se considera como algo vano y transitorio, una mera apariencia carente de valor que, al derrumbarse, nos lleva al desengaño. A su vez, la vida no es nada más que algo fugaz e insignificante cuyo inevitable final ya está marcado de antemano: la muerte, igual para todos. Es por ello que la literatura refleja este pesimismo existencial por medio de tópicos literarios como el tempus fugit o el memento mori; además de reflexionar habitualmente sobre la transitoriedad y la vanidad del mundo y la inexorabilidad de la muerte.
b) Neoestoicismo: en lugar de la pasión desbordante que caracterizaba los textos renacentistas, los autores del Barroco van a decantarse por un ocultamiento de dichas pasiones o por la imperturbabilidad del ánimo. Aun así, el amor no desparecerá y será uno de los temas centrales del Barroco, si bien las referencias a este sentimiento serán más sucintas, más discretas; o estarán más relacionadas con la trascendencia del alma.
a) Pesimismo: en un contexto de crisis socioeconómica y marcado por la Contrarreforma católica, el mundo terrenal se considera como algo vano y transitorio, una mera apariencia carente de valor que, al derrumbarse, nos lleva al desengaño. A su vez, la vida no es nada más que algo fugaz e insignificante cuyo inevitable final ya está marcado de antemano: la muerte, igual para todos. Es por ello que la literatura refleja este pesimismo existencial por medio de tópicos literarios como el tempus fugit o el memento mori; además de reflexionar habitualmente sobre la transitoriedad y la vanidad del mundo y la inexorabilidad de la muerte.
b) Neoestoicismo: en lugar de la pasión desbordante que caracterizaba los textos renacentistas, los autores del Barroco van a decantarse por un ocultamiento de dichas pasiones o por la imperturbabilidad del ánimo. Aun así, el amor no desparecerá y será uno de los temas centrales del Barroco, si bien las referencias a este sentimiento serán más sucintas, más discretas; o estarán más relacionadas con la trascendencia del alma.
c) Ideología conservadora: todas las manifestaciones artísticas del Barroco perseguirán la difusión y la promoción de los valores de los estamentos privilegiados. De esta forma, poemas, obras de teatro y narraciones destacarán por su excesiva religiosidad; expondrán la necesidad de aceptar los privilegios sociales de la nobleza y el clero; defenderán el derecho divino de la monarquía a gobernar; establecerán la honra -tanto masculina como femenina- como un valor fundamental...
d) Ruptura del equilibrio: frente al estilo renacentista, el Barroco pretenderá conmover y sobrecoger al receptor con una literatura que tenderá a la exageración, la dificultad y el contraste. Se apartará, por tanto, del lenguaje común y apostará por un estilo mucho más complicado, con abundantes cultismos y recursos literarios tales como la metáfora, el hipérbaton o los juegos de palabras. El objetivo es crear un reto intelectual para el lector.
e) Mitología: se mantiene del Renacimiento el gusto por los temas y personajes de la mitología grecolatina.
2.- La lírica
a) ¿Qué es? Todas aquellas producciones en verso que realizan una profunda reflexión sobre el sentido de la vida, la inexorabilidad de la muerte o, simplemente, crear un goce estético en el lector.
b) ¿Qué temas toca? Predominan las reflexiones filosófico-morales sobre la vida y la muerte; el amor desde el punto de vista neoestoico; la crítica social (mostrar los vicios del mundo de forma satírica para burlarse de ellos y, de paso, corregirlos); y la mitología.
c) ¿Cuántas corrientes hay? Dos:
c) ¿Cuántas corrientes hay? Dos:
* Conceptismo: esta corriente persigue expresar el mayor número de ideas con las menores palabras posibles. El mensaje que el autor desea transmitir es lo que cobra importancia y, para ello, deberá valerse de toda clase de recursos literarios que jueguen con el significado de las palabras, como las metáforas, los calambures, las paradojas, las antítesis... Su principal figura fue Francisco de Quevedo, cuya producción poética se puede dividir en tres grupos:
- Poesía moral y religiosa: con un tono pesimista y angustiado, Quevedo trata temas como la fugacidad de la vida; la inevitabilidad de la muerte; la vanidad de las apariencias... También defiende la moral católica de su tiempo.
- Poesía amorosa: en Quevedo el amor no es entendido como una pasión física, sino como un sentimiento elevado capaz de durar más allá de la muerte, otorgándole, en definitiva, una naturaleza trascendente y metafísica.
- Poesía satírica o burlesca: en esta hace gala de un sentido del humor cargado de ironía con la que se burla de los vicios de la sociedad; los tipos sociales (médicos, judeoconversos, letrados); o sus propios enemigos, como el ilustre Luis de Góngora.
* Culteranismo: esta corriente no se preocupa especialmente de las ideas, sino de la forma de transmitirlas. Es decir, pretende construir un mundo de belleza verbal y sensorial que sirva de evasión frente a la realidad miserable de la época. Para ello, se emplean recursos que potencien la musicalidad de los versos (aliteraciones), un léxico muy culto, exquisito y colorista, metáforas sorprendentes, hipérbatos exagerados... Todo con el objetivo de provocar en el lector un goce intelectual o sensorial. Por tanto, el mensaje pierde importancia. De hecho, los culteranistas renunciarán a expresar sus sentimientos en sus poemas, siendo el más destacado Luis de Góngora, de cuya producción podemos destacar sus Soledades, la Fábula de Polifemo y Galatea, las letrillas burlescas (Ándeme yo caliente y ríase la gente) y los sonetos.
POEMAS DE LOS TRES POETAS MÁS REPRESENTATIVOS DEL BARROCO