Tipos de descripciones.
Hay varias formas de describir a una persona. Según se describan sus rasgos recibe distintos nombres.
Hay varias formas de describir a una persona. Según se describan sus rasgos recibe distintos nombres.
Prosopografía. Es la descripción de los rasgos físicos de la persona, de su apariencia externa.
Etopeya. Es la descripción de rasgos psicológicos o morales del personaje: su manera de ser, de actuar, su carácter.
Retrato. Es una descripción combinada en la que se describen las características físicas y morales de la persona. Une la prosopografía y la etopeya.
Caricatura .Es un tipo de descripción en la que los rasgos físicos y morales de la persona se presentan de manera exagerada, acentuando los defectos.
VOCABULARIO PARA DESCRIBIR
A continuación, os dejo varios ejemplos de descripciones de personas.
Adjetivos y sustantivos para describir personas:
Pelo
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Áspero, blanco, encrespado, descuidado,
desordenado, escaso, grasiento, rubio, moreno, ondulado, recogido, rizado,
rojizo, ...
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Cara
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Ancha, arrugada, rolliza, amplia, afligida, ascética,
desconfiada, chupada, dulce, dura, castigada, confiada, endurecida, curtida,
triste, expresiva, fina, franca, fresca, impenetrable, inexpresiva,
inteligente, jovial, juvenil, larga, llana, llena, delgada, redonda, salvaje,
seca, serena, severa, simpática, tranquila, ...
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Frente
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Amplia, arrugada, baja, estrecha,
inteligente, lisa, abombada...
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Ojos
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Ausentes, bajos, azulados, concentrados, despiertos, duros,
movedizos, fugitivos, impenetrables, intensos, lagrimosos, maliciosos,
maquillados, negros, redondos, abultados, soñadores, tiernos, turbios,
tristes, vivos...
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Nariz
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Aguileña, chata, amplia, redonda, fina,
larga, puntiaguda, recta, torcida...
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Boca
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Fina, grande, dura, firme, pequeña,
redonda, habladora...
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Cuello
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Corto, fino, grueso, elegante, largo...
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Dientes
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Alineados, blancos, amarillentos, torcidos,
desiguales...
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Mejillas
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Rollizas, caídas, hinchadas, redondas, rudas, suaves,
blandas, rojas, chupadas, ...
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Labios
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Blanquecinos, estrechos, finos, grandes, herméticos,
delgados, voluptuosos, sensuales, ..
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Pestañas
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Espesas, largas, negras, claras, rizadas...
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Cejas
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Arqueadas, espesas, gruesas, juntas,
delgadas, separadas, peludas, canosas...
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Orejas
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Grandes, largas, redondas, pequeñas,
enrojecidas...
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Color
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Pálido, rosado, albino, moreno, ceniciento, amarillento,
bronceado, tostado, aceitunado, enfermizo, oscuro...
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Manos
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Ágiles, blancas, cálidas, cuidadas, rugosas, delicadas,
finas, torpes, firmes, grandes, gruesas, rudas, jóvenes, sensibles,
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Piernas
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Atléticas, delgadas, gruesas, enclenques, flacas, fuertes,
secas, rechonchas, robustas, musculosas,...
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Aspecto general
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Alto, atlético, bajo, robusto, corpulento, ligero, esbelto,
delgaducho, nervioso, débil, firme, fuerte, gordo, deportivo, ágil, joven,
canijo, torpe, envejecido, maduro, barrigudo, flaco, sano, macizo,...
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Vestido
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Desastrado, discreto, elegante, feo, chillón, pobre,
sencillo, sofisticado, llamativo...
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ADJETIVOS PARA DESCRIBIR EL CARÁCTER
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Amable, alegre, simpático,
antipático, apasionado, atento, atrevido, trabajador, atolondrado, educado,
ingenioso, exigente, entusiasta, generoso, huraño, hosco, intratable,
estúpido, extravagante, inexpresivo, listo, malhumorado, malicioso,
mentiroso, gruñón, valiente, bobo, burlón, despierto, fanático, fanfarrón,
feliz, fiel, honrado, listo, chulo, presumido, desvergonzado, miedoso,
prudente, memo, zopenco, bruto, majadero, calmoso, confiado, contestatario, cobarde, serio, culto, sincero, bárbaro, soez, chiflado, sabiondo, salvaje,
sensato, solitario, soso, soñador, cazurro, decidido, desordenado, divertido,
dócil, idiota, iluso, imbécil, insolente, inteligente, orgulloso, campechano,
rebelde, risueño, llorón, triste, tímido, extrovertido... y muchos más.
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VOCABULARIO PARA DESCRIBIR
A continuación, os dejo varios ejemplos de descripciones de personas.
-Veamos un ejemplo de retrato en el que podemos encontrar mezclados elementos físicos y psicológicos, aunque en distinta proporción, en este texto de Galdós.
"El pobre chico de este modo burlado se llamaba Luisito Cadalso, y era bastante mezquino de talla, corto de alientos, descolorido, como de ocho años, quizá de diez, tan tímido que esquivaba la amistad de sus compañeros, temeroso de las bromas de algunos, y sintiéndose sin bríos para devolverlas. Siempre fue el menos arrojado en las travesuras, el más soso y torpe en los juegos, y el más formalito en clase, aunque uno de los menos aventajados, quizás porque su propio encogimiento le impidiera decir bien lo que sabía o disimular lo que ignoraba."
Benito Pérez Galdós, Miau
-Un conocido ejemplo de prosopografía es la descripción que hace Calisto de Melibea, en la que sigue el orden tradicional, de arriba abajo.
"Comienzo por los cabellos. ¿Ves tú las madejas de oro delgado que hilan en Arabia? Más lindos son, y no resplandecen menos. Son tan largos que le llegan hasta sus pies; después, trenzados y atados con la delgada cuerda, como ella se los pone, que no hace más para convertir los hombres en piedras. [...]
Los ojos verdes, rasgados; las pestañas luengas; las cejas delgadas y alzadas; la nariz mediana; la boca pequeña; los dientes menudos y blancos; los labios, colorados y grosezuelos; el torno del rostro poco más luengo que redondo; el pecho alto; la redondez y forma de las pequeños senos, ¿quién te la podría figurar?, que se despereza el hombre cuando las mira. La tez lisa, lustrosa; el cuero suyo oscurece la nieve, la color mezclada, cual ella la escogió para sí. [...]
Las manos pequeñas en mediana manera, de dulce carne acompañadas; los dedos luengos; las uñas en ellos largas y coloradas, que parecen rubíes entre perlas."
Fernando de Rojas, La Celestina.
-Más difícil es encontrar casos puros de etopeya pues, aunque se centre la descripción en el carácter o la psicología de un personaje, antes se le suele presentar siquiera sea brevemente. En 1928 se publicó una novela de Azorín titulada Félix Vargas. Etopeya en la que asistimos al retrato moral del protagonista; del personaje interesa sobre todo su psicología más que los rasgos físicos o, incluso, sus acciones. Tenemos aquí una etopeya dilatada a lo largo de un centenar de páginas, de la que escogemos un fragmento como muestra.
"A la tristeza y a la cólera del viaje ha sucedido una ligerísima satisfacción. Lucecita de esperanza. Sosiego dulce, explanación del ánimo recogido. Se halla el poeta sentado un momento ante el mar. El mar, en esta hora de sol esplendente, es de un azul intenso. La satisfacción en el espíritu de Félix se densifica. Un observador superficial podrá creer que el poeta navega en plena locura. ¿No son todos estos pesares suyos íntimos sutilidades, remilgos, escrúpulos inverosímiles? Cirrus impalpables en el horizonte, nervios sutiles en una hoja mirada a trasluz. Y, sin embargo, esta realidad intrínseca de Félix es una realidad sólida para la mente del poeta. Asidos a las cosas del mundo rudas, ásperas, violentas, ¿cómo se podrá juzgar de estos conflictos íntimos? Y nada hay más hondo, más emocionante, más dramático y más elevado. Félix se da exacta cuenta del problema. Una figura de mujer -la de Julia Récamier, por ejemplo- ha podido conmover la emotividad del poeta; se ha emocionado Félix ante la imagen de la dama; ha percibido que en el trabajo, al escribir, tal motivación le prestaba fluencia y fervor. Se podrá juzgar locura el apasionamiento del poeta por este juego de las imágenes; pero las imágenes con quienes se identifica el poeta y las complicaciones espirituales que estas imágenes suscitan son la razón última de la vida de Félix.